Más repercusiones en relación a la designación de los "Controladores de Faltas".
A continuación reproducimos la nota de La Nación, del día de la fecha.
El gobierno de Jorge Telerman afirmó ayer que la nómina de 39 controladores de faltas, entre los que se incluyen asesores de legisladores y gremialistas, que habían sido designados en diciembre último sin haber participado de un concurso, fue confeccionada por los distintos bloques de diputados de la ciudad.
Esta afirmación, que surge tras la polémica desatada a raíz de esos nombramientos, fue refutada, sin embargo, por distintos legisladores de la ciudad. "El gobierno de Telerman necesitaba los nombramientos con suma urgencia. Por eso confeccionó una lista de 39 nombres y los giró a la Legislatura para su aprobación. Eso fue lo que pasó. Los nombres los suministró el Poder Ejecutivo, que ahora quiere desentenderse del tema", dijo a LA NACION el diputado de Recrear Jorge San Martino.
La controversia por la designación de los 39 controladores de faltas surgió cuando se hizo público que algunos nombres que están en la lista fueron -y son- asesores de legisladores e incluso que dos personas nombradas trabajarían, una (Karina Ravich) como abogada del Sindicado de Peones de Taxis y otra (Juan Ignacio Arzubi Clavo) se habría desempeñado como abogado de la empresa de autos de alquiler Arbitra SA.
Llamado a concurso
Anoche, un vocero del gobierno de la ciudad aseguró que Telerman ya firmó un decreto (el N° 340) para que en los primeros días de abril se llame a concurso para cubrir los 39 cargos de controladores de faltas, que habían sido designados temporariamente por el gobierno y la Legislatura porteña.
"Es cierto que nosotros teníamos que solucionar las designaciones de los controladores. La ciudad tiene 3,5 millones de faltas que resolver y si no había nombramientos provisorios eso se iba a perder. No obstante, fueron ellos quienes suministraron los nombres", dijo un vocero del Ministerio de Gobierno.
Según la fuente, los controladores no habían asumido en sus cargos debido a una serie de dificultades que durante los últimos tres meses impidieron que comenzaran a trabajar.
"Pese a la urgencia, ninguno de los agentes asumió su cargo. Esto sucedió primero porque la Legislatura se demoró en enviar la notificación de las designaciones, y después porque hubo problemas edilicios con la nueva sede donde trabajarán los controladores", dijo el vocero del Ministerio de Gobierno, que conduce Diego Gorgal.
Por su parte, la diputada de ARI Liliana Parada aseguró: "En todo esto hubo acuerdo político entre el Ejecutivo y distintos bloques de legisladores. La nómina con los futuros controladores de faltas nos llegó dos minutos antes de la votación. No sabíamos los antecedentes ni teníamos sus currículum. Por eso, el bloque de ARI se opuso a las designaciones".
Los denominados controladores de faltas son un cuerpo de agentes que surgió en 2001 y cuya tarea es resolver infracciones antes que lleguen a la justicia de faltas de la ciudad.
Para algunos legisladores, el gobierno porteño creó este cuerpo para repartir más cargos en la administración pública a cambio de favores. "No entendemos muy bien la función de estos controladores. Para las multas está la justicia de faltas. Todo esto genera largas colas y trámites innecesarios", dijo la diputada Beatriz Baltroc.
Desde el gobierno de Telerman insistieron en que la nómina fue confeccionada por los legisladores porteños y que los técnicos del Poder Ejecutivo sólo chequearon si los nombres que figuraban en la lista no tenían antecedentes penales y sanciones administrativas.
"A los legisladores les correspondía verificar los antecedentes y los currículum de cada una de las personas que iban a ser designadas. Eso no se hizo y ahora el gobierno de Telerman tiene que emitir un decreto para que se llame a concurso. Si las personas designadas son idóneas para esos cargos y ganan el concurso, estarán en condiciones de asumir sus respectivos cargos", concluyó una fuente del gobierno.
Por Jesús A. Cornejo
De la Redacción de LA NACION
A continuación reproducimos la nota de La Nación, del día de la fecha.
El gobierno de Jorge Telerman afirmó ayer que la nómina de 39 controladores de faltas, entre los que se incluyen asesores de legisladores y gremialistas, que habían sido designados en diciembre último sin haber participado de un concurso, fue confeccionada por los distintos bloques de diputados de la ciudad.
Esta afirmación, que surge tras la polémica desatada a raíz de esos nombramientos, fue refutada, sin embargo, por distintos legisladores de la ciudad. "El gobierno de Telerman necesitaba los nombramientos con suma urgencia. Por eso confeccionó una lista de 39 nombres y los giró a la Legislatura para su aprobación. Eso fue lo que pasó. Los nombres los suministró el Poder Ejecutivo, que ahora quiere desentenderse del tema", dijo a LA NACION el diputado de Recrear Jorge San Martino.
La controversia por la designación de los 39 controladores de faltas surgió cuando se hizo público que algunos nombres que están en la lista fueron -y son- asesores de legisladores e incluso que dos personas nombradas trabajarían, una (Karina Ravich) como abogada del Sindicado de Peones de Taxis y otra (Juan Ignacio Arzubi Clavo) se habría desempeñado como abogado de la empresa de autos de alquiler Arbitra SA.
Llamado a concurso
Anoche, un vocero del gobierno de la ciudad aseguró que Telerman ya firmó un decreto (el N° 340) para que en los primeros días de abril se llame a concurso para cubrir los 39 cargos de controladores de faltas, que habían sido designados temporariamente por el gobierno y la Legislatura porteña.
"Es cierto que nosotros teníamos que solucionar las designaciones de los controladores. La ciudad tiene 3,5 millones de faltas que resolver y si no había nombramientos provisorios eso se iba a perder. No obstante, fueron ellos quienes suministraron los nombres", dijo un vocero del Ministerio de Gobierno.
Según la fuente, los controladores no habían asumido en sus cargos debido a una serie de dificultades que durante los últimos tres meses impidieron que comenzaran a trabajar.
"Pese a la urgencia, ninguno de los agentes asumió su cargo. Esto sucedió primero porque la Legislatura se demoró en enviar la notificación de las designaciones, y después porque hubo problemas edilicios con la nueva sede donde trabajarán los controladores", dijo el vocero del Ministerio de Gobierno, que conduce Diego Gorgal.
Por su parte, la diputada de ARI Liliana Parada aseguró: "En todo esto hubo acuerdo político entre el Ejecutivo y distintos bloques de legisladores. La nómina con los futuros controladores de faltas nos llegó dos minutos antes de la votación. No sabíamos los antecedentes ni teníamos sus currículum. Por eso, el bloque de ARI se opuso a las designaciones".
Los denominados controladores de faltas son un cuerpo de agentes que surgió en 2001 y cuya tarea es resolver infracciones antes que lleguen a la justicia de faltas de la ciudad.
Para algunos legisladores, el gobierno porteño creó este cuerpo para repartir más cargos en la administración pública a cambio de favores. "No entendemos muy bien la función de estos controladores. Para las multas está la justicia de faltas. Todo esto genera largas colas y trámites innecesarios", dijo la diputada Beatriz Baltroc.
Desde el gobierno de Telerman insistieron en que la nómina fue confeccionada por los legisladores porteños y que los técnicos del Poder Ejecutivo sólo chequearon si los nombres que figuraban en la lista no tenían antecedentes penales y sanciones administrativas.
"A los legisladores les correspondía verificar los antecedentes y los currículum de cada una de las personas que iban a ser designadas. Eso no se hizo y ahora el gobierno de Telerman tiene que emitir un decreto para que se llame a concurso. Si las personas designadas son idóneas para esos cargos y ganan el concurso, estarán en condiciones de asumir sus respectivos cargos", concluyó una fuente del gobierno.
Por Jesús A. Cornejo
De la Redacción de LA NACION
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